Higiene y prevención bucodental
Cuidamos las sonrisas del futuro
Como medida de prevención de afecciones bucodentales, en cada una de nuestras visitas informamos y aconsejamos a nuestros pacientes sobre hábitos correctos de limpieza e higiene oral y trasladamos la importancia de ser constantes y mantenerlos a lo largo de toda la vida.
Para garantizar que estos hábitos sean parte de nuestra rutina diaria es clave que se incorporen en edades muy tempranas. Por ello hacemos especial divulgación, través de nuestro equipo de especialistas en odontopediatría, entre los pacientes más pequeños y los adultos que los acompañan para que conozcan las medidas de higiene y limpieza necesarias para cuidar su salud dental y, así, también su salud general.
Recomendaciones para una correcta higiene bucodental
Cepillarse los dientes y encías todos los días después de las comidas, al menos tres veces al día. Procurar no dejar pasar más de 15 minutos entre el final de cada comida y el cepillado.
Realizar una buena técnica de limpieza cepillando todas las caras de los dientes: la exterior, la interior y las zonas de masticación.
No olvidar cepillar la lengua con el propio cepillo o con un limpiador lingual para prevenir la halitosis y enfermedades de la cavidad oral.
Escoger el cepillo y pasta de dientes adecuado. Nuestro/a dentista puede aconsejarnos según nuestras características y necesidades.
Utilizar el hilo dental y los cepillos interdentales al menos una vez al día para una limpieza más exhaustiva que garantice la eliminación de restos de alimentos acumulados entre los dientes.
Al final de la limpieza, y como complemento al cepillado, realizar un enjuague bucal con un colutorio al menos una vez al día.
Renovar el cepillo de dientes cada 3 o 4 meses y el cepillo interdental cada 4 o 5 días, o bien cuando las púas estén desgastadas o deformadas.
Acudir al dentista 1 o 2 veces al año para revisar el estado de la boca y prevenir enfermedades periodontales.